Para que tu ropa se mantenga como nueva por más tiempo, te dejamos algunas recomendaciones simples pero importantes:
Lavar con agua fría o tibia (máx. 30°).
Dar vuelta la prenda antes de lavar, especialmente si tiene brillos o estampas.
Usar jabón neutro y evitar el uso excesivo de suavizantes.
No usar lavandina ni productos abrasivos.
No retorcer la prenda para escurrir.
No mezclar colores claros con oscuros.
Secar a la sombra y preferentemente al aire libre.
Evitar la secadora, ya que puede dañar telas delicadas o encoger prendas.
Planchar a temperatura baja o media, si la prenda lo permite.
Colocar un paño entre la plancha y la prenda para proteger telas con brillo, estampas o bordados.
Guardá tus prendas dobladas o colgadas en perchas anchas para conservar su forma.
Cuidar tu ropa es también cuidar lo que amás. 💖
Si tenés dudas sobre alguna prenda en particular, ¡escribinos y te ayudamos!